LA MARCA
Estudio de joyería fundado por la artista visual Micaela Lucas. Su sensibilidad se formó primero a través de la pintura clásica, un entrenamiento del ojo, la mano y la luz. Con el tiempo, su admiración por la complejidad de la naturaleza y su fascinación por las civilizaciones antiguas, los símbolos sagrados y los ciclos cósmicos convergieron en una nueva forma de expresión: la joyería como objeto ritual.
Nacida del deseo de compartir su exploración creativa y su curiosidad interior, MILA SAI no es sólo una colección, sino una práctica de observación y significado. Cada pieza comienza como una forma de cera esculpida a mano, como una pequeña escultura en movimiento. A continuación, se funde en plata 930 reciclada y se acaba con técnicas tradicionales de joyería en Madrid. El proceso es deliberado. Local. Arraigado en el respeto.
Cada pieza se considera un fragmento de arte, no una mercancía. Una reliquia para llevar puesta. Un compañero que invita a la quietud, la conciencia y la presencia. Cada detalle es intencionado: un gesto de cuidado por el material, por la historia y por quien lo lleva.
EL FUNDADOR Y DISEÑADOR
El camino creativo de Micaela se desarrolló fuera de las instituciones formales. Entre Argentina y España, estudió por inmersión: observando materiales, practicando con las manos, aprendiendo directamente de artesanos y técnicas ancestrales. Su enfoque es intuitivo y riguroso, moldeado por el silencio e informado por el símbolo.
Trabaja directamente con lápiz y cera de abeja, esculpiendo formas que surgen espontáneamente, guiadas por el tacto y la memoria. Su formación en arte clásico se traduce en una especial atención a la luz, el equilibrio y la estructura invisible de las cosas.
Para Micaela, las joyas no están hechas para impresionar, sino para acompañar. Cada objeto transmite ecos de algo más profundo: conexión, linaje, claridad. Cree que la belleza reside en el encuentro, no en la perfección. Sus piezas no declaran un significado, sino que lo revelan silenciosamente con el tiempo.
PRODUCCIÓN Y MATERIALES
Todas las piezas están hechas a mano en Madrid con métodos sostenibles y a pequeña escala. Micaela comienza cada una de ellas en cera, dándoles forma como bocetos táctiles. Estas formas se funden en plata y luego los orfebres locales las terminan y pulen. Mantener la producción local permite prestar atención a cada paso, al tiempo que se minimizan los residuos y el impacto medioambiental. Las formas que surgen a menudo sorprenden incluso a la propia artista: encarnan la libertad creativa, equilibrando las irregularidades orgánicas con una precisión deliberada. Cada pieza es única, pero forma parte de un linaje común. Estamos comprometidos con la calidad, el cuidado y la artesanía ética.
Los materiales se eligen no sólo por su belleza, sino por su capacidad de perdurar física, simbólica y emocionalmente.
Plata 930 reciclada: Ligeramente más pura que la tradicional 925, ofrece mayor durabilidad y riqueza.
Oro 24K Vermeil (2,5-3 micras): Oro profundo y radiante con un acabado duradero.
Embalajeecológico: Diseñado para minimizar el impacto medioambiental.
Aunque no es totalmente sostenible, cada elección -desde la cera hasta el acabado, desde la fundición hasta el embalaje- refleja un compromiso con la creación responsable y el valor a largo plazo. Son piezas pensadas para permanecer a tu lado durante décadas. Con el tiempo y el cuidado, se convierten en tesoros que pasan de mano en mano.
